TODOS CONTRA UNO. EL FINAL

Viene del post anterior
Recapitulamos:
Presentación del libro TIRANT DE PAPER el día 14 de abril en Barcelona con más escritores en la mesa que dinamizadoras en un libro de cuentos sobre el comercio barcelonés. Se las esperaba. No se disculparon. No vinieron. Su obligación es promover el comercio, tener ideas, aprovecharlas, insuflarlas entre sus comerciantes: no basta con repartir velas por Navidad ni distribuir trípticos…Dar soporte a cada actividad. Y si no se puede se pre-avisa. Y se cambia la fecha. Falta de disciplina.
Entro en enfado. Escribo una carta irónico-ácida que llega hasta las 23 dinamizadoras y 5 se enfadan. Desde gerencia se asustan: quieren paz y el tema se les está desbordando.

Continua.

Perdonará el lector mi tardanza. Digamos que entré en convalescencia, con los nervios en el estómago y con ganas de olvidar. Y porqué prometí “el cierre” porque de lo contrario hoy estaría tratando de otros asuntos. Digamos que a nadie le gusta regodearse en sus heridas o echarle sal. Así que seré breve, intensamente breve. Y luego de la rabia, el olvido.

De hecho me dicen que siempre me estoy quejando de todo. Y quizás tienen razón. Quiero escribir otro post sobre la debacle de la cultura y creo que invitaré, como ya dije, a mi amigo el marciano, para que me divierte, me saque de copas, lleguemos a una cogorza espacial y dejemos que el verano fluya con sabores de anuncio, de chicas y chicos guapos y olor a mar.

¿Qué pasó?
Que  algunas de las dinamizadoras que no dinamizan se encendieron, se sublevaron en su grupo de whats haciendo burla, mefa, risa de eso que tanto debía de precuparles como para temer el fin de la raza humana: que dinamo venía de dinamizadoras. En su grupo de whats se encienden, me maldicen y se burlan del efecto “dinamo”  -me cuentan. 

Había una reunión de patrones -otros 23- e influenciados por las dinamizadoras que no dinamizan -la ciudad está desdinamizada quién la desdinamizará, el buen desdinamizador que la desdinamice buen desdinamizador será- llegaron a un acuerdo.

Una llamada teléfonica un viernes por la mañana.

-Oye, Jordi,que no quieren ni verte. Me han pedido que dejes tu responsabilidad como President del Jurat de LLetres al Comerç 2019, Que buscaremos a otro y también un equipo nuevo. Que no quieren que dirijas la gala, que ni quieren que la presentes…

EXPULSADO POR DECIR LA VERDAD. Nadie podrá imaginar el dolor, el puñetazo atestado.  ¿Se puede echar a alguien que hace todo gratis (bueno, uno cobra 70 euros por leerse los originales del concurso algo muy inferior a los 200/250 que se cobra por ser jurado del premio Joaquim Ruyra de literatura)? Bueno, si no había precedentes, cuenten con uno.

Como no me gusta recorrer los misterios del dolor ni peregrinar por imágenes de ángeles caídos, lo dejo aquí. Publicar un libro con los relatos ganadores, promover las presentaciones, organizar una gala antológica y sumar positivos donde había cierta indiferencia y falta de ideas parece ser algo poco o insuficiente para procurar el agradecimento de un grupo.

Y cierro. Con prisa. El comercio de la ciudad de Barcelona va a vivir una revolución del comercio electrónico y de nuevas prácticas comerciales los próximos años que necesitará de un grupo de profesionales del márketing, CEOS, de la publicidad, de posicionamiento creativo y, sí, de creadores que va hacer muy difícil en el estado actual de la cuestión, la supervivencia de las tiendas. Porque ya la palabra “tendero” quedó obsoleta. Ahora el comerciante online y offline necesita conocimientos superiores: casi, casi de algoritmos…

De risa fue que en la entrega de los premios a los comerciantes en el Hotel Juan Carlos II se diera un premio a la innovación a una comerciante de Horta que al recoger el galardón atestó: “si, internet nos hace muy mal”. Y entonces, ¿el premio de innovación se lo dieron a su peinado?

No necesitan ustedes personas que en un ataque de celos de niños  -la palabra rebequeria en catalán es de lo más aguda y se traduce por rabietas-  actuen con rabia infantil, tanto hombres adultos como las dinamizadoras y que en vez de agradecer la labor de una persona creativa le corten la mano y la cabeza a alguien que puede darles de comer los próximos años.  Y si no comer, sí ideas para nutrir sus negocios.

En todo caso, y FIN,  gracias a algunos patrones, de corazón, por entenderme y ponerse de mi lado, a otras de las dinamizadoras que se desmarcaron de la decisión final y a los amigos por la cantidad de emails y comentarios recibidos en mis redes sociales poniéndose de mi lado. Siempre es bueno saber donde están.

Próximo post: la mujer más fuerte den mundo, en breve